Conoce a los genios de Latin Funk, SETENTA
Written by Staff on January 28, 2021
Creada en 2006, SETENTA, la banda de Latin Soul propaga una mezcla única por todo el mundo. En su quinto álbum, MATERIA NEGRA, la banda radicada en París regresó a sus raíces: funk latino duro con mucha percusión afro-latina en la mezcla, contrastada con los deslumbrantes acentos de armonías vocales y melodías frescas y acogedoras.
Pero en el fondo, hay algo más oscuro, más áspero y más funky que en los lanzamientos anteriores, especialmente en el trabajo de guitarras y sintes, con arreglos medio blues en tonalidad menor y en el contenido lírico.
Esencialmente, hay una sensación más pesada en este disco, influenciado sin duda alguna por el lado negativo de la oscuridad de los tiempos que se experimenta en todo el mundo debido a la pandemia, la recesión subsecuente y la falta de liderazgo efectivo por parte del gobierno y de solidaridad global para lidiar con la crisis.
Del lado positivo, el inspirador movimiento de Black Lives Matter y las protestas internacionales contra los gobiernos opresivos, el racismo sistemático, la avaricia corporativa, el calentamiento global y la explotación medioambiental, tienen que ver con la seriedad que hay en MATERIA NEGRA.
El sonido de SETENTA siempre ha sido conmovedor, con raíces tropicales caribeñas, pero en esta ocasión hay una temática afro-céntrica más presente y un ángulo de R&B psicodélico revestido con adornos galácticos del espacio exterior, recordando al precursor, Mandrill, así como a la vibra afro-futurista de Parliament-Funkadelic.
El álbum fue grabado y creado medio del distrito parisino de Strasbourg Saint Denis el cual, al igual que algunos barrios de New York, encarna el mundo cosmopolita en el que SETENTA ha disfrutado de un desarrollo evolutivo durante la última década, durante la cual han ganado más confianza y talento.
MATERIA NEGRA es su mejor álbum hasta ahora; un disco profundo, significativo y sumamente funk, al mismo tiempo cósmico e íntimo, universal y personal, lleno de sonidos bailables. Cuidado, ¡los bad boys han llegado!
